El juego se desarrolla en Japón en el siglo XV, en el que las características históricas se mezclan con la fantasía. Jugamos como un guerrero que tiene la tarea de rescatar a su maestro, heredero de una antigua línea de sangre, y vengarse de los secuestradores.

El héroe, un Sekiro titular, es un hombre de una mano con una prótesis mágica en lugar de su extremidad perdida. Este no es el único cambio sobrenatural en su cuerpo, ya que está maldito a nunca encontrar la paz en la muerte. No descansará eternamente hasta que salve a su maestro.

Este juego combina peleas espectaculares con mecánicas sigilosas. Pasamos la mayor parte del tiempo escondiéndonos sin ser detectados bajo las narices de los guardias y eliminando a los enemigos por sorpresa. Sin embargo, también nos enfrentamos regularmente con ellos, que utilizan un complejo sistema de arcade que se parece a la serie Dark Souls. Incluso hay batallas impresionantes con jefes poderosos.